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Bugambilia: descubre todo sobre esta planta, sus cuidados y propiedades

La Bugambilia es una planta de floración increíblemente popular por sus vivos colores y vibrantes flores. Originaria de América Central y del Sur, esta enredadera tropical puede hacer que cualquier jardín parezca un hermoso paraíso. Tanto si eres un entusiasta de la jardinería como si acabas de iniciarte en esta afición, la Bugambilia es la planta perfecta para dar un toque de color a tu espacio exterior. No sólo tiene una estética impresionante, sino también muchos beneficios para la salud. Sigue leyendo para saberlo todo sobre esta fascinante planta, sus cuidados y lo que la hace tan especial.

Te sorprenderá lo fácil que es cultivar bugambillas en su jardín.

Las plantas de Bugambilia son una forma estupenda de aportar colores vivos a tu casa o jardín.

Conocidas por su vistosa floración, encontrarás una amplia gama de colores de bugambilia entre los que elegir.

Su cultivo puede ser un poco complicado, pero nuestros expertos te explicarán todo lo que necesitas saber en esta guía.

¿Qué es la bugambilia?

Las bugambilias, también conocidas como buganvillas, son un género de plantas ornamentales originarias de Sudamérica. Son populares entre los jardineros por sus flores vivas y abundantes. Son un elemento paisajístico y ornamental básico en todo el mundo.

Las flores de las bugambilias son pequeñas, blancas y poco vistosas. Lo más destacado, sin embargo, son las brácteas florales, inflorescencias en forma de hoja que rodean a las flores propiamente dichas en pares de 3 ó 6. Son delgadas, con un papel de color blanco. Son finas, con textura de papel, por lo que a menudo se llama a la bugambilia “la flor de papel”.

De hecho, cuando se habla de “flores de bugambilia”, se hace referencia a estas brácteas.

Plantas de bugambilia

La bugambilia se presenta en muchos colores, desde el blanco, el amarillo y el naranja hasta tonos fucsia, magenta, rojo, burdeos y púrpura. Hay más de 300 variedades de bugambilia entre las que elegir. La mayoría son híbridos, criados por los colores únicos de las brácteas florales.

En algunos casos, incluso se pueden encontrar bugambilias variegadas. Las más comunes, o las variedades “clásicas”, son:

Bougainvillea spectabilis: también conocida como la gran buganvilla. Es la variedad más conocida y espectacular. Produce un tallo grueso y leñoso y puede trepar hasta una altura de casi 12 metros. Las brácteas florales suelen ser rosas, moradas o rojas, aunque algunas también pueden ser blancas e incluso naranjas.

Bougainvillea glabra: también conocida como buganvilla menor. Es la mejor opción si busca una variedad arbustiva. A menudo, la glabra crece hasta una altura de unos 3 metros y tiene una temporada de floración muy larga. Si desea cultivar bugambilia como bonsái, esta variedad es con diferencia la que recomiendan la mayoría de los jardineros.

Bougainvillea peruviana: originaria de Perú, esta variedad suele producir ramas muy espaciadas. Puede cultivarse como arbusto grande o como trepadora. Las brácteas florales suelen ser moradas o magenta.

Según la variedad, la bugambilia se puede cultivar como arbusto, enredadera o incluso como arbolito. Todas las bugambilias tienen tallos cubiertos de espinas finas y afiladas. En su área de distribución nativa, son plantas de hoja perenne, pero pierden su follaje cuando se exponen a temperaturas frías o a la sequía.

Cómo cultivar una planta de bugambilia

La bugambilia es una planta tropical que disfruta de mucho sol y calor. Si se cultiva en un clima adecuado producirá sus icónicas flores casi todo el año.

Esto es lo que debes saber si quieres cultivar la tuya.

1. Cultivo de bugambilia en exterior

La luz

Planta tu bugambilia en una parte de tu jardín que reciba una exposición total al sol. Esta planta necesita al menos 6 horas de luz al día para desarrollarse y al menos 8 horas de luz solar para producir esas impresionantes flores. Una luz insuficiente no sólo frenará su crecimiento, sino que también provocará un follaje denso y muy pocas flores.

El suelo

El suelo ideal para cultivar bugambilia debe ser arcilloso, rico en nutrientes y con un buen drenaje, con un pH de entre 5,5 y 6,5. Sin embargo, esta planta también tolera el suelo arcilloso. Sin embargo, esta planta también tolera suelos arcillosos y ligeramente salinos, arenosos, ligeramente ácidos o alcalinos. Recomendamos utilizar enmiendas del suelo para mejorar el drenaje, como corteza de pino o moho de hoja, y cubrir los 7,5 cm superiores del suelo con compost.

Temperaturas

La temperatura ideal para cultivar bugambilia en el exterior oscila entre 18 °C y 35 °C (65 °F y 95 °F). Esta planta no tolera las heladas. Aunque es una planta perenne, que conserva su follaje durante la parte más fría del año, empezará a perder hojas si las temperaturas descienden por debajo de 10 °C (50 °F). Al mismo tiempo, si las temperaturas superan los 38 °C (100 °F) durante períodos prolongados, la planta puede dejar de florecer.

Espaciado

Asegúrate de que tus plantas de bugambilia tengan suficiente espacio para sus raíces plantándolas a una distancia mínima de 40 pulgadas (1 metro). El espaciado depende en gran medida de la variedad que cultive y de cómo lo haga. Por ejemplo, los arbustos de bugambilia que se cultivan como seto pueden plantarse más juntos si los podas con regularidad. Los árboles de bugambilia, en cambio, suelen alcanzar los 9 metros de altura y necesitan una separación mínima de 3 metros.

El agua

La Bugambilia es muy tolerante a la sequía. Prefiere que la rieguen poco pero en profundidad. Una vez cada dos semanas, regando una vez que los 5 cm superiores de la tierra estén secos al tacto. A medida que la planta madure y se establezca, podrá reducir aún más el programa de riego. Es mejor no regar en caso de duda, ya que las plantas de bugambilia son muy susceptibles a la podredumbre de las raíces.

Abonos

Como la mayoría de las plantas ornamentales con flor, la bugambilia se alimenta mucho y necesita aplicaciones regulares de fertilizante. Utilice un fertilizante de liberación lenta en primavera, al comienzo de la temporada de crecimiento, o aplique una solución de fertilizante líquido una vez al mes durante la temporada de floración.

Procure que la proporción de nutrientes sea de 10-10-10 o 20-20-20. La Bugambilia necesita una mezcla equilibrada de nitrógeno y fosfato para florecer. Sin embargo, demasiado nitrógeno fomentará el crecimiento de hojas y tallos en lugar de flores.

2. Cultivo de bugambilia en macetas

La bugambilia es una planta excelente para el cultivo en macetas, especialmente si vives en un clima más frío. La planta será más pequeña y fácil de manejar, y te recompensará con un exuberante despliegue de flores durante muchos meses.

Cuando cultive Bugambilia en macetas, debe prestar atención a dos aspectos principales:

La luz

La mayoría de las plantas de interior no tienen acceso a la misma cantidad de luz que las que crecen en el jardín. Por lo tanto, elija la parte más soleada de su casa, donde su Bugambilia pueda recibir un mínimo de 6 horas de luz brillante y directa cada día. Una habitación con orientación sur u oeste sería perfecta.

El agua

Aunque plante su Bugambilia en una maceta con agujeros de drenaje y utilice una mezcla de tierra que drene bien, la posibilidad de regarla en exceso es mucho mayor. El suelo de su jardín permitirá que el agua se filtre y también se evapore a mayor velocidad. En el interior, sin embargo, tendrá que comprobar periódicamente la humedad del suelo.

Sugerimos regar bien la Bugambilia sólo cuando los 5 cm superiores de la tierra estén completamente secos. Evite también el riego de fondo, ya que no le dará una indicación adecuada de los niveles reales de humedad del suelo.

Para todo lo demás, consulta nuestra guía de cultivo en exterior.

Cómo cuidar una planta de bugambilia

La bugambilia es fácil de cuidar. Necesita una poda anual antes de la temporada de floración, seguida de un pinzado regular de las brácteas florales muertas. En esta guía veremos con más detalle sus cuidados y mantenimiento esenciales.

Pero antes de empezar, hay una pregunta crucial que merece la pena hacerse:

– ¿Son tóxicas las plantas bugambilia?

La savia de las plantas bugambilia es ligeramente tóxica. En algunos casos, puede provocar irritaciones cutáneas graves y alergias, similares a las causadas por la hiedra venenosa o el roble venenoso. Si se ingieren tallos en grandes cantidades, también pueden provocar náuseas, vómitos y otros tipos de molestias gastrointestinales. Por ello, es más seguro mantenerlos alejados de mascotas y niños pequeños.

Además, tenga en cuenta que las plantas de bugambilia tienen espinas. Así que siempre que realice tareas de cuidado o mantenimiento de esta planta, asegúrese de llevar un par de guantes de jardinería resistentes.

Poda y recorte

El mejor momento para podar tu bugambilia es en invierno o a principios de primavera, o una vez finalizada la temporada de floración. Dependiendo del tamaño de su planta, la forma de podarla y recortarla puede variar.

En el caso de las bugambilias grandes, necesitarás unas tijeras de podar o incluso una sierra de mano. Corta las ramas que sean demasiado largas o pesadas o las que no se ajusten a la forma que deseas para tu bugambilia. En el caso de arbustos o setos, puedes utilizar tijeras de podar y recortar los extremos de las ramas. Esto favorecerá esencialmente un nuevo crecimiento en primavera.

A lo largo del ciclo de floración, puede recortar aún más el nuevo crecimiento para dar a la planta un aspecto más lleno.

Durante la época de floración, pellizque regularmente las cabezas de las flores muertas, seguidas de las puntas del tallo en el que crecía la flor. Así se asegurará de que su bugambilia produzca nuevos tallos y capullos. Con un mantenimiento adecuado, su bugambilia florecerá durante al menos seis meses al año.

Trasplante

Si cultivas bugambilia en macetas, te alegrará saber que le gusta estar un poco enraizada. Algunos jardineros creen que esto le ayuda a producir flores más abundantes. Lo que te recomendamos es que la mantengas en la misma maceta hasta que empieces a ver raíces asomando por los agujeros de drenaje. Una vez que esto ocurra, es señal de que puedes trasplantarla a una maceta unas dos veces más grande.

Cuando trasplantes tu bugambilia, recuerda que las raíces son muy delicadas. Para empezar, agarra la planta por la parte inferior del tallo y levántala con cuidado de la maceta original. Llena la nueva maceta con mezcla de tierra y haz un agujero en el centro, aproximadamente del tamaño del cepellón de la planta. Coloca con cuidado el cepellón en el agujero y cúbrelo con tierra. No intentes desenredar, podar o manipular demasiado las raíces. La bugambilia entrará en estado de shock y tardará semanas en recuperarse.

Plagas y enfermedades

La bugambilia es una planta robusta y resistente a la mayoría de plagas y enfermedades. Es más sensible a la podredumbre de las raíces, pero puedes evitarla fácilmente si sigues un buen programa de riego.

Los pulgones son la plaga más común, sobre todo si cultivas bugambilia en el exterior. Puedes deshacerte de ellos regando las plantas de vez en cuando.

Las orugas, como la de la bugambilia, mordisquean de vez en cuando las hojas. Por suerte, son un sabroso tentempié para pájaros y otros animales pequeños, así que no es necesario aplicar pesticidas para deshacerse de ellas.

En el caso de la bugambilia cultivada en interior, vigile los ácaros y rocíe el envés de las hojas con una solución de agua y alcohol isopropílico para eliminarlos.

Usos de la bugambilia

Las plantas de bugambilia son más conocidas por su alto valor ornamental. Pero ¿sabía que las brácteas florales también son comestibles?

Se utilizan a menudo en la medicina tradicional por sus propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y antioxidantes, y ayudan en caso de úlceras, diabetes, infecciones víricas o problemas hepáticos.

Una de las formas más populares de disfrutar de las brácteas florales comestibles es preparar té de bugambilia. Se recogen las brácteas frescas, se retiran los tallos, se enjuagan bien y se dejan en agua hirviendo durante 10 minutos. No dude en añadir un poco de jengibre o canela para darle un toque más aromático. Para algo más sustancioso, las brácteas de la flor de bugambilia también pueden comerse crudas, en ensaladas o sopas, e incluso rebozadas y fritas.

Aclaramos que sólo las brácteas son comestibles, ya que los tallos, hojas y espinas son moderadamente tóxicos.

Bugambilia para el cuidado de la piel

La bugambilia es una planta que tiene numerosos beneficios para el cuidado de la piel. A continuación, se detallan algunos de ellos:

  1. Propiedades antiinflamatorias: La bugambilia es conocida por sus propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir la inflamación en la piel, especialmente en personas con piel sensible o con afecciones inflamatorias como el acné o la rosácea.
  2. Propiedades antibacterianas: La bugambilia contiene compuestos que pueden ayudar a combatir las bacterias que causan el acné y otras infecciones de la piel. Al aplicar la bugambilia en la piel, se puede reducir la cantidad de bacterias y, por lo tanto, prevenir futuros brotes de acné.
  3. Propiedades antioxidantes: La bugambilia es rica en antioxidantes que pueden ayudar a proteger la piel contra los radicales libres que pueden causar daño celular y contribuir al envejecimiento prematuro de la piel.
  4. Hidratación de la piel: La bugambilia contiene mucílagos, un tipo de fibra soluble en agua, que puede ayudar a retener la humedad en la piel. Al mantener la piel hidratada, se puede reducir la apariencia de líneas finas y arrugas.
  5. Propiedades exfoliantes: La bugambilia contiene ácido salicílico, un exfoliante suave que puede ayudar a eliminar las células muertas de la piel. Al hacerlo, se puede mejorar la textura y apariencia de la piel, dejándola más suave y radiante.
  6. Propiedades calmantes: La bugambilia también puede ser utilizada para calmar la piel irritada o inflamada. Al aplicarla en la piel, puede ayudar a reducir la picazón, el enrojecimiento y la inflamación.

Conclusión

Las plantas de bugambilia son una fantástica adición a cualquier jardín y también tienen un aspecto impresionante como planta de interior. Hay que cuidarlas un poco, pero si sigues esta guía disfrutarás de hermosas flores durante todo el año.

Repasemos lo esencial:

  • La Bugambilia es famosa por sus flores brillantes y vivas, pero las flores en sí son pequeñas y sencillas. Son las brácteas florales que rodean las flores las que muestran sus hermosos colores.
  • Estas brácteas florales no sólo tienen un aspecto asombroso, sino que también son comestibles y saludables. Prueba a preparar un té de bugambilia y compruébalo tú mismo.
  • Sin embargo, las hojas, tallos y ramas de la bugambilia son tóxicos y están cubiertos de espinas, así que ten cuidado y mantén alejados a los niños pequeños y a las mascotas si es posible.
  • La Bugambilia tiene muchas formas y tamaños, según la variedad, desde pequeños arbustos a enredaderas trepadoras o árboles altísimos.

Así que, si quieres dar un poco de color a tu vida, ¡una planta de bugambilia es una gran elección!

3 comentarios en “Bugambilia: descubre todo sobre esta planta, sus cuidados y propiedades”

  1. Sobre sus conclusiones “Sin embargo, las hojas, tallos y ramas de la bugambilia son tóxicos” tengo algunas dudas sobre esta planta; cuento con dos plantas en mi jardín, al lado de una de ellas tenía una planta de tara (Caesalpinia tinctoria) la buganvilla se enredo sobre la tara y terminó por “matarla” en el caso de la segunda planta tenía un naranjo; la buganvilla lo cubrió y también acabo por “matarla”.
    Busco una explicación sobre el caso; no se si usted puede ayudarme a esclarecer este fenómeno, se trataría de una alelopatía o la exudación por sus raíces y tallos de sustancias venenosas?. O quizás otras causas del cual desconozco.
    Agradezco su atención y pronta respuesta.
    Saludos.

    1. Lo mas probable es que se deba a una alelopatía, también depende en la forma en que se haya enredado en la planta y el tiempo que tardaron en “morir”, pues podría ser que al cubirirlas, impidiera que los rayos del sol llegaran a las plantas adecuadamente y afectaran su fotosíntesis.

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